
Y si además la madre desesperada se encuentra el agüita amarilla de uno de sus tiranos sobre la blancura que el Ariel Sensaciones ha dejado sobre la colcha recién planchada de su cama de matrimonio, se le puede quedar la cara como la de Forrest Gump con su caja de bombones o como la del Sargento de Hierro cuando le tocan los bemoles.
Sea cual sea la cara que te haya tocado poner hoy, no dejes que la tiranía pueda con tu vida, busca tu aliciente, sube tu adrenalina y NO OLVIDES NUNCA QUIEN ERES.